Cultura Sociedad

8M: Una lucha sin final

"Rosie, la remachadora" (imagen destacada) se convirtió en un símbolo de la fortaleza de la mujer durante la Segunda Guerra Mundial y desde entonces ha sido reinterpretada mundialmente como símbolo del empoderamiento femenino.

«Levanto mi voz, no para gritar, sino para que se escuche a quienes no tienen voz… No podemos triunfar si la mitad está siendo reprimida». Las palabras del Nobel de la Paz, Malala Yousafzai, son el corolario de una nota de la BBC, ofreciendo las razones por las cuáles las mujeres, en su Día Internacional, deben seguir adelante con su lucha.

Los datos que aportó la ONU:

  • Ha crecido el número de mujeres que viven en contextos de conflicto y crisis, una cifra que duplica con creces la registrada en el decenio de 1990.
  • Casi un 10% de las mujeres y niñas del mundo siguen sumidas en la pobreza extrema con escasas posibilidades de salir de ella.
  • En 113 países, la jefatura del Estado nunca ha estado ocupada por una mujer. Se están produciendo avances en la participación de las mujeres en la esfera política; la proporción de mujeres ha aumentado más del doble a escala mundial, al pasar del 11 al 27% en la actualidad. Sin embargo, el ritmo del cambio hace que la paridad de género sea todavía un sueño lejano.
  • La crisis mundial de violencia contra las mujeres y niñas continúa y muestra escasos indicios de remisión: alrededor de 736 millones de mujeres han sufrido violencia física o sexual a manos de una pareja o violencia sexual por parte de alguien más en algún momento de sus vidas.

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