«Ojalá tengamos una interna sana», sentenció Yeza, quien hoy da el nombre de su sucesor en Pinamar

El acertijo lo planteó anoche un colaborador, en un programa por Twitter del portal El Canciller. El pediatra Carlos Kambourian – bajo proceso por la causa del Garrahan, de guardia en el Hospital de Pinamar los fines de semana -, deslizó al aire ante el intendente, que el propio Martín Yeza le había revelado que lo sucedería una mujer (la única en las gateras es la concejal Alejandra Apolonio). “Te dije – lo corrigió -, que podría ser una mujer. Al sucesor lo estamos presentando mañana a la tarde (por hoy)”, avisó ante el beneplácito por la primicia del conductor Fran Casaretto.

“Presentaremos a nuestro precandidato del PRO. No será igual a mí. Tendrá todo el derecho – se explayó -, a desarrollar su personalidad. Lo más difícil es la sucesión política. Le pasó a Patricia (Bullrich) en la Gobernación de Buenos Aires”.

Yeza, medido, ratificó que buscará un nuevo horizonte político: “es probable que diciembre me encuentre en otro lugar”. Parafraseó incluso al extinto Néstor Kirchner: “el que sonó, fue”, indicó.

En una entrevista cordial, el jefe de los equipos técnicos del “cabezón” Cristian Ritondo (en negociaciones para integrarse detrás de Néstor Grindetti, y enfrentar a Diego Santilli, por la candidatura a la Gobernación), dijo que al nombrar a uno solo (El Diario del Mar adelantó que sería Juan Ibarguren, con su hermano Alejo como primer postulante al concejo deliberante), “otras personas no van a ser”.

Explicó que los proyectos deben ser “sustentables” y estar “por encima de las personas”. Recordó que antes de asumir en el 2015, hubo 5 intendentes destituidos por corrupción y calificó su gestión con un 8. “Excelente”, reaccionó Casaretto.

Mantuvo su palabra de no ir por la reelección y manifestó satisfacción porque “las cosas pasen de esta manera. Voy al supermercado, al centro con mi hijo a caballito, los vecinos me ven corriendo por alguna vereda…camino tranquilo por Pinamar y me siento orgulloso. Trato de dar lo mejor”.

Sobre su futuro, harina de otro costal, dijo que su suerte está “atada” a la del “Cabezón” Ritondo. Agregó que primero ubicarán a todos sus cuadros y luego “entramos nosotros”. Mencionó que tiene posibilidades por delante. ¿”En una oficina de la calle Rivadavia”?, quiso saber el conductor. En ese punto mencionó a Néstor Kirchner y su pragmatismo: “el que sonó, fue”, señaló. “Si me toca, integraré una lista nacional”, añadió.

La amena charla tuvo muchas aristas. Algunas para destacar:

-Ratificó su alineamiento con Patricia Bullrich y su admiración por Mauricio Macri, pero no desestimó la capacidad de trabajo de Horacio Rodríguez Larreta ni la de Diego Santilli. Claro, se disciplinó detrás de Ritondo-Grindetti y reveló que está abocado “al encastre de todas las figuras” dentro del PRO. “Ojalá – lanzó – tengamos una interna sana”.

Hoy quizás hablemos de literatura anglosajona antigua y cómo hacer dormir a dos bebés con @Fran_Casaretto_ aunque lo más probable sea que hablemos un poco del Pro, las PASO, y los desafíos políticos del año que viene. Hoy en Spaces. pic.twitter.com/rlcTRINTK9

— Martín Yeza (@martinyeza) May 28, 2023

-Manifestó que “en la Argentina los proyectos fracasan porque la confianza está rota”. Indicó que el PRO, “con todos los defectos que pueda tener, es un partido moderno, del siglo XXI, con diagnósticos par abordar los problemas de manera profesional”.

-Descartó la discusión entre izquierdas y derechas, criticó al gobernador Axel Kicillof y puso el acento en la generación de riqueza para poder luego distribuirla. Se pronunció en contra de la nacionalización del litio. “Chile es el que tiene menos reserva y el que mejor la explota”, expresó en alusión a lo que pasa en Bolivia y la Argentina.

¿Cuál es el principal problema de Pinamar para Yeza? “En nuestra ciudad veranea el 5% más rico de la Argentina. Es una localidad de laburantes rodeados de gente del más alto poder adquistivo. Trabajo para que nuestra gente se sienta a gusto y no resentida”.

Por otra parte, defendió al médico Kambourian, quien “se comió un garrón por ir al frente. Es una persona extraordinaria”, sentenció. El pediatra, a la vez, indicó que se encuentra en una posición inómoda por haber “enfrentado a poderosos”.